lunes, 9 de abril de 2007

Se acerca mi cumpleaños y por primera vez no me agrada mucho la idea. No ando contando los días desde el mes anterior, no tengo idea si lo voy a celebrar o no, si voy a trabajar, si voy a estar en Santiago o lejos, si voy a estar con mis amigas o con "guatones alcohólicos y flacos sin músculos" como me dijo alguien hoy. Me tiene sin cuidado y sin ánimo. Creo que todavía soy joven, pero ya pasó el primer cuarto de siglo y no he hecho nada, no tengo nada y mis hermanos se dedican a refregármelo en la cara.
Ya casi no tengo pega, me la paso en la casa, intento trabajar en un proyecto pendiente, de puro aburrida y ansiosa me paso visitando la cocina viendo qué puedo comer. Más encima, la incipiente relación que tenía parece que se esfumó... la verdad es que no tengo idea qué pasó. Y claro, como tengo la conciencia un poco sucia me paso mil rollos y me siento una maldita. Y él, brilla por su ausencia y no voy a hacer nada más que esperar a que se pronuncie. Y lo peor, es que parece que me gusta más estar sola.
Y tan bien que iba el año...

2 comentarios:

Sofia dijo...

Mmmm, demasiado poco incentivo... Cómo que no celebrar tu cumple!!! Olvídalo, te tomamos de un bracito y te llevamos a celebrar. Lamento eso sí de esa "desaparición" del susodicho, espero que sea algo pasajero, tal vez se arregla luego, cómo sabes? Las cosas se ordenan de pronto sin que uno se de cuenta incluso.

Un abrazo Ale.

Tuccini dijo...

Cuando todo parece confuso y sin sentido, siempre aparecen las amigas o amigos como Sofia que lo ayudan a uno a pensar mas clarmanete. Claro que hay que celebrar su cumpleaños !!! Por supuesto que tiene que invitarme cuando sus amigas se lo celbren.
En cuanto al pastel, deje que las cosas pasen nomas, no se culpe ni se haga problemas, todo pasa por algo.

Saludos